Dakhla, juega a las arenas Robinsons

Dakhla, juega a los robinsons de las arenas

Dakhla es un pequeño pedazo de paraíso en el sur de Marruecos, perdido entre las aguas del Atlántico y las arenas del Sahara. Estar allí es una delicia para ser consumido sin moderación. Kilómetros de playas se extienden de un lado a otro de la ciudad: una oportunidad para relajarse, una oportunidad para disfrutar de todo tipo de actividades acuáticas.

Estas costas están entre las más bellas de Marruecos. Aislados del mundo por el desierto circundante, son un verdadero remanso de paz, el lugar ideal para disfrutar del sol de 25 grados durante todo el año.

En los alrededores, dos playas son particularmente famosas, la del PK25 y la de Foum El Bouir. El primero es popular entre los que les gusta relajarse: es un lugar de descanso, donde se puede nadar tranquilamente en las tranquilas y cristalinas aguas de la laguna, mientras que en Foum El Bouir, el ambiente es más animado.

Es también un sitio dedicado a los placeres de los deportes de nieve. Surfistas, kitesurfistas y windsurfistas, ya sean aficionados o profesionales, se reúnen aquí, se dejan llevar por las olas y los vientos. Más adelante, la Punta del Dragón es otro punto de renombre internacional: los rompientes son impresionantes y los surfistas más famosos ya se han lanzado a estos espectaculares tubos que corren cientos de metros.

Puerta del desierto, abriéndose al África subsahariana, Dakhla es también y sobre todo una puerta del paraíso.